Es una planta china de la que no conozco el nombre...
Me regalaron hace más de 20 años un brotecito, diminuto y lo planté en una maceta entonces para irlo trasplantando allá donde iba.
Va creando una especie de racimos boca abajo, lentamente, despacito...
De pronto, una noche, siempre por la noche, sus racimos se elevan luchando contra la gravedad y se abren mágicamente...De sus flores, bellísimas sólo da testimonio la madrugada...Con la luz del sol, se cierran de nuevo y no vuelven a abrirse y con los días se secan y se marchitan...
De pronto, una noche, siempre por la noche, sus racimos se elevan luchando contra la gravedad y se abren mágicamente...De sus flores, bellísimas sólo da testimonio la madrugada...Con la luz del sol, se cierran de nuevo y no vuelven a abrirse y con los días se secan y se marchitan...
Mi corazón....Se ha convertido en esa planta china...Mi corazón vive en las cuatro estaciones. Renació en otoño , contra todo pronóstico porque el otoño es época de flores marchitas y hojas caídas...Agonizó en invierno, se quedó helado ante una realidad no deseada... Se rompió en mil pedazos y gritó su dolor de un modo sordo, entre lágrimas...
Es primavera...De repente, de un modo mágico que aún no llego a entender,. mi corazón ha florecido...
Cada noche, se eleva luchando contra la gravedad de la realidad, como mi planta china y...florece...
Me duermo bañada en lágrimas de ternura y me despierto siendo consciente de que tengo un corazón cuajado de flores chinas... flores de un día, hijas de un instante...
Enciendo velas amarillas, cada noche, cada amanecer cuando mi corazón florece y elevo una petición a los dioses que mueven nuestras vidas en alguna desconocida dirección.Tal vez sólo sea un delirio, pero dentro de mí, mi corazón florece, alimentadas sus raíces por la esencia del amor incondicional, del amor en mayúsculas...
Nada espero, nada busco, a nada aspiro...simplemente AMO... y noche tras noche se desperezan a la luz de la luna mis flores chinas...
Se marchitarán cuando sea...pero hoy, como cada noche, abrazada a mi almohada, cerrando los ojos y pensando en quién amo, florecerán de nuevo en la madrugada de mi sueño que jamás se hará realidad, que nunca se materializará. Aún y así, ahí sigo....soñando y floreciendo...
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Es una Reina de la Noche, Dama de la Noche, Princesa de la Noche. Es un cactus, aunque no lo parezca.
ResponderEliminarTú eres una Reina de la Luz, una Dama del Día, una Princesa Azul, no estás hecha para vivir de noche, pero si lo piensas, hasta en la más absoluta oscuridad lo bello sigue siendo bello, e incluso más aún, porque amortigua lo tenebroso.
Florecer es una aventura, como la metamorfosis... y al final siempre, todo, se convierte en flores y mariposas...
Uffff...gracias , Canelita...
ResponderEliminarNo sabía de qué planta se trataba pero ahora tal vez en tiendo por qué me ha inspirado mi reflexión.
¿azul? el alma, sí, y se lleva mal con almas de colores poco definidos...
Florecer es doloroso algunas veces pero enla vida, todo sucede por algo...
Al final, como dices muchas veces cuando tertuliamos, quién más ama , quién más da, es de algún modo bendecido...
Mil besos, compañera.
y además no es de China...es un cactus..y los cactus son todos deAmérica...
ResponderEliminarBesucos
¡¡Jo!!
ResponderEliminarNo hay como tener amigas que dominan el arte de la...jardinería jajajaj
el caso es que la persona que me dió el brote, me dijo que lo había conseguido nada menos que en China ya que era un cliente mío, muy mayor, que había sido diplomático y en uno de sus periplos laborales pasó en China varios años...
En fin...que no es china...¡qué desilusión!jajajaj
igual la que está ahí todavía, frente a la "muralla China", soy yo...
Besos de viernes, Daisy.
Alex
Me encanta esta planta muchos años la tuve abandonada y hoy es el día que me ha regalado flores hermosas.
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