"Aquel que no puede aullar, no podrá encontrar su manada." (Charles Simic)

sábado, 4 de abril de 2009

Espejos...



Hay espejos de agua, paisajes que resultan un espejo, mares como espejos, ojos que reflejan, espejos decorativos, el "espejo de la madrastra de Blanca Nieves , espejos rotos que los supersticiosos dicen que dan mala suerte y....SERES ESPEJO...
Recuerdo las historias de los vampiros y sonrío. Los vampiros, según se cuenta, no se reflejan en los espejos, no tienen luz propia, no existen como seres vivos y vienen del mundo de las tinieblas...
Hay seres espejo; estoy segura. Seres que reflejan la luz de otros porque su luz personal está enterrada bajo capas de escombros vitales. Resultan engañosos porque como enormes espejos, nos deslumbran cuando nuestra luz se proyecta sobre ellos. Nos la devuelven y creemos que son seres luminosos, brillantes, llenos de destellos...Son seres espejo...
Hay montones de ellos y son difíciles de detectar. Cuando nos damos cuenta es cuando ahÍtos de luz ajena, se retiran a sus mundos oscuros a digerir toda esa energía que han asimilado de otros. Desaparecen ante nuestros ojos y nos sentimos vacíos, exhaustos, tristes por perder esos enormes faros de luz que habían aparecido en nuestras vidas, así, por casualidad.
Ni casualidad, ni faros. Nos detectaron en su momento y fuimos una fuente de alimento emocional mientras ellos absorbían nuestra luz como si fueran una pila enorme a punto de ser cargada; y ¿faros?, no, sólo tenemos que mirar dentro de nosotros de nuevo para darnos cuenta de que no eran faros; eran , simple y llanamente, seres que reflejaban nuestra propia luz, esa que habita dentro de nosotros, esa que nos ilumina en los malos momentos, que nos da calorcito en las noches frías de los desiertos emocionales...
¿Vampiros? o...¿sólo espejos?. Que más da; dejan tu mundo interior desolado, un vacío en el alma y una inmensa tristeza ,pero lo que no saben, es que aún doloridos y tristes, somos fuente inagotable de luz, de energía, y volveremos a nosotros mismos, con una herida más en el corazón, pero brillando de nuevo como seres de luz.
¡Qué pena me dan los SERES ESPEJO!....

2 comentarios:

  1. Son los espejos de la vida los que necesitamos a veces para poder ver la luz que hay dentro de nosotros, nos duele cuando los perdemos, pero debemos alegrarnos porque gracias a ellos nos re-descubrimos, hacen que nuestros sentimientos afloren y que seamos capaces de ver lo que hay dentro de nuestro corazón.

    Nos confunden porque pensamos que esa era su luz, pero la magia de la vida hace que se crucen en nuestro camino para que seamos capaces de vernos a nosotros mismos. La vida nos los pone delante cuando perdemos nuestro rumbo, cuando pensamos que ya no somos capaces de sentir, cuando perdemos la fé en el amor,.... entonces es cuando descubrimos que seguimos vivos, que seguimos sintiendo, que renacen nuestros sentimientos.

    Todos los partos son dolorosos, pero detrás de ese dolor aparece una nueva vida, una vida que nos dá por bien recibido el dolor anterior.

    Aprovechemos estos seres espejo y ese dolor que nos producen para alegrarnos por esa nueva vida que nace dentro de nosotros.

    Un abrazo Loba Azul y gracias por enseñarnos el camino.

    Un loco pirata...

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  2. Todo lo que sea exceso es malo

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